“Señor hágase tu
voluntad”…pero en mi salvación yo hago la mía
Cuando alguien se enferma,
sufre un accidente o muere, muchos dicen "Era la voluntad de Dios".
Si las personas no logran una meta laboral, profesional, artística, política,
deportiva, etc. La gente dirá: "No era el momento, será cuando Dios
quiera". Y si las logran comentarán: "Dios quiso que lo
consiguiera" o "la gloria es para Dios". En las conversaciones
cotidianas todo el tiempo estamos diciendo: "si Dios quiere",
"cuando Dios lo permita", "que sea la voluntad de Dios".
El
ser humano que cree en Dios, aparentemente acepta con simpleza y total
normalidad la soberanía de Dios, y pareciera que la voluntad del Señor formara,
intrínsecamente, parte de su ser.
Pero si se trata de su
propia salvación, entonces, ahí sí, no aceptan y rechazan la voluntad de Dios.
Si escuchan que nada de los que ellos hagan contribuye a su salvación, y que
Dios, en su soberanía, elige a quienes han de ser salvos, se indignan y dicen:
"Fui YO el que decidió seguir a Cristo y además Dios no hace acepción de
personas, Dios es amor y no somos sus marionetas".
Terminan remplazando el Dios
soberano de sus vidas cotidianas, por un dios que no existe, que es fabricado
por sus egos. Un dios que respeta y acata la soberanía del hombre para decidir
si quiere salvarse o no. Un dios, que resulta ser a la final, una imagen de si
mismos, de la idolatría a su propia humanidad.
DICE EL ARMINIANO: "No
me molesta y acepto la soberanía de Dios cuando se trata del pueblo
desobediente de Israel al que permitió fuera esclavizado varias veces. Cuando
se refiere la humanidad perdida de la antigüedad a la que le mando el diluvio,
o los pueblos paganos de Sodoma y Gomorra a los que destruyo, o los pueblos
enemigos de Israel a los que aniquilaba totalmente en las batallas contra los
judíos, no me molesta por que Dios es soberano. Pero si me molesta que aplique
su soberanía en mi salvación, y que no me permita elegir a mí si la quiero o
no; a mí, que soy su más perfecta creación. Por eso, mi ego no me permite
aceptarlo. Porque Él me ama tanto que me dio libre albedrio para yo decidir si
sigo a Cristo o no".
Sin embargo, la biblia, que
entre otras cosas, es la historia de la salvación, está llena de principio a
fin de elecciones de Dios, unas basadas en su justicia, y todas emanadas de su soberanía.
- · En el diluvio salvo los animales y a un
puñado de seres humanos files a Él.
- · Eligió a Abraham. Un hombre de un pueblo
pagano para que fuera padre de muchas naciones.
- · Eligió a Isaac y no a Ismael
- · Determinó que Israel, un pueblo de entre
muchos que había sobre la tierra, fuera su pueblo escogido.
- · Cuando destruyo Sodoma y Gomorra, eligió para
salvación a Lot, su mujer y sus hijas.
- · De los mellizos de Isaac, eligió a Jacob y
aborreció a Esaú.
- · Eligió a Moisés, Josué, José, Los profetas,
David, Salomón, etc.
Y las escrituras son claras
sobre la soberanía de Dios:
Romanos 9: 12-23
"Se le dijo: El mayor servirá al menor.13 Como está escrito: A Jacob
amé, mas a Esaú aborrecí.14 ¿Qué, pues, diremos? ¿Que hay injusticia en Dios?
En ninguna manera. 15 Pues a Moisés dice: Tendré misericordia del que yo tenga
misericordia, y me compadeceré del que yo me compadezca. 16 Así que no depende
del que quiere, ni del que corre, sino de Dios que tiene misericordia. 17
Porque la Escritura dice a Faraón: Para esto mismo te he levantado, para
mostrar en ti mi poder, y para que mi nombre sea anunciado por toda la tierra.
18 De manera que de quien quiere, tiene misericordia, y al que quiere
endurecer, endurece. 19 Pero me dirás: ¿Por qué, pues, inculpa? porque ¿quién
ha resistido a su voluntad? 20 Mas antes, oh hombre, ¿quién eres tú, para que
alterques con Dios? ¿Dirá el vaso de barro al que lo formó: ¿Por qué me has
hecho así? 21 ¿O no tiene potestad el alfarero sobre el barro, para hacer de la
misma masa un vaso para honra y otro para deshonra? 22 ¿Y qué, si Dios, queriendo
mostrar su ira y hacer notorio su poder, soportó con mucha paciencia los vasos
de ira preparados para destrucción, 23 y para hacer notorias las riquezas de su
gloria, las mostró para con los vasos de misericordia que él preparó de
antemano para gloria"
Cesar Ángel. Julio 8 de 2015
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