La biblia No se trata de ti.
Empezaré por compartir lo que la biblia NO ES. La biblia NO:
A) No fue escrita para
enriquecer tu vida diaria.
B) No es una guía o manual
espiritual.
C) No es un mapa que te
ayudará a encontrar el propósito de Dios para tu vida en particular.
D) No es una historia acerca
de Dios y como tomó la decisión de sacrificar a su hijo para podernos dar una
existencia más plena y satisfactoria.
Pero desgraciadamente, ya sea
explícitamente o no, esto es lo que la mayoría de los cristianos piensa. Ya sea
que abiertamente lo declaren o lo demuestren por medio de sus predicaciones y estudios
bíblicos, en el fondo está el gran “dios” llamado “Yo”.
¿Qué es lo que hacemos? Y
pudiera generalizar ya que es el común denominador de las predicaciones
contemporáneas. ¿Qué es lo que hacemos?, leemos la biblia, digamos la historia
de José, y lo primero que pensamos es “¿Cómo puedo aplicar esto a mi vida?”,
“¿Cómo es esto relevante para mí?”, Leemos de cómo David derrota a Goliat e
inmediatamente pensamos “¿Cuál es mi gigante?”, ”¿Cuáles son mis piedras?”, de
manera natural nos queremos hacer a nosotros mismos los protagonistas de la
palabra de Dios, de una u otra manera queremos torcer el significado de estos
pasajes y “aplicarlos” a nuestra vida cotidiana, ignorando por completo lo que
Dios nos está diciendo a través de estos pasajes, ignoramos la revelación de
Dios y la sustituimos por nuestras vidas y lo que “hoy hay para mí”. Hacemos
nuestro gozo y felicidad, el fin de toda escritura.
Veamos rápidamente un ejemplo
para entender a lo que me refiero.
Jeremías 29:11 ``Porque yo sé
los planes que tengo para vosotros--declara el SEÑOR-- ``planes de bienestar y
no de calamidad, para daros un futuro y una esperanza.
Este versículo es muy famoso,
todos lo conocemos, cientos de veces hemos escuchado que Dios “Nos promete” que
tiene para nosotros “planes de bien y no de mal”. ¿Quieres obtener ese cliente
que tanto deseas?, “Dios también lo quiere, porque él tiene para ti “planes de
bien y no de mal”, ¿Quieres esa casa nueva que tanto anhelas? “Dios también lo
quiera, porque él tiene para ti “planes de bien y no de mal”. Muy probablemente
te estarás preguntando ¿Pero, ¿qué hay de mal en esto? veamos las respuestas de
algunos estudiosos de la palabra.
El punto central aquí es que
estamos torciendo la escritura para hacerla relevante a nuestra situación actual
y específica, sin tomar en cuenta el verdadero significado y contexto del
versículo y, por otro lado, estamos haciendo a Dios responsable de una
“promesa”, que tal vez, jamás extendió para nosotros, al menos no es ese
versículo. Veamos.
(Referente a Jeremías 29:11)
Voddi Baucham enlista tres
razones sobra la mala interpretación del versículo.
"Primero que nada,
torcemos la escritura hacemos de ella una promesa directa para nosotros, cuando
fue una promesa hecha directamente a cierto grupo de personas, en una
circunstancia específica, durante un período de tiempo específico y en un lugar
en específico”
“En Segundo lugar, torcemos su
significado porque lo hacemos para el “ahora”, cuando en realidad fue una
promesa multigeneracional.”
“En tercer lugar, lo torcemos
porque lo interpretamos “para mí”, cuando en realidad es “para nosotros”
Baucham también critica las
enseñanzas que utilizan Jeremías 29:11 como una promesa “individual” de salud y
riqueza para cristianos en tiempos modernos.
Jefferson Bethke también opina
el respecto.
"Lo primero que tenemos
que entender es que no podemos tomar un versículo y prostituirlo en nuestra
página de Facebook o Twitter sin considerar el contexto en el que fue escrito”
Empezamos a ver el trasfondo,
de cierta manera, pensamos que todo lo que dice la palabra es “para mí”, “para
mi beneficio”, “para mi bienestar”, nos hacemos a nosotros mismos el centro de
la palabra. ¿Cuántas veces no te han dicho que “eres más que vencedor”?
(Romanos 8:37). Te sorprenderás al enterarte que ese versículo NO ES una
promesa para ti, en el sentido de que cualquier obstáculo lo puedes vencer y
que todo es posible para ti… El contexto de Rom 8:27 dice que Dios ha
predestinado a un grupo de personas para salvación y sí Dios ha dispuesto esto…”
¿Quién contra nosotros?” (Rom 8:31), Si Dios nos ha elegido y predestinado
“Somos más que vencedores!” y “nada ni nadie nos separará de su amor” (Rom
8:38-39).
La doctrina de la
predestinación es negada y rechazada por la mayoría de los cristianos y sin
embargo es lo que esta frase tan famosa respalda “Si Dios me ha elegido,
vendrán una cantidad de cosas contra nosotros, tribulación, angustia,
persecuciones, hambre, desnudez, etc.… pero estate tranquilo, porque Dios te ha
elegido y en TODAS ESTAS COSAS, “somos más que vencedores”, porque Dios te ha
elegido y nadie puede contender contra Dios u oponerse a su voluntad, de eso
habla el versículo.
Esto es lo que pasa, no
estamos conformes con lo que la palabra de Dios nos comunica, entonces tomamos
los textos y los hacemos significar lo que queremos que signifiquen. Somos
llamados a predicar la palabra fielmente, ir y exponer lo que la biblia dice,
sin embargo, comúnmente sucede lo contrario, YO SOY el que quiero predicar
acerca de cierto tema, algo “relevante” para las personas, algo para “el aquí”
y “el ahora”, entonces busco versículos que pueda acomodar (torcer) para
predicar “lo que YO quiero”, esto es lo que sucede en las iglesias modernas.
Me imagino un gran reflector,
como los de un escenario, en la biblia, ese reflector siempre está apuntando a
Dios, de Génesis a Apocalipsis, siempre está apuntando a Dios, nunca, ni por un
segundo, este apunta hacia el hombre, sin embargo, en tantas iglesias, ese
reflector siempre está apuntando al hombre y cuando apunta hacia a Dios es
porque en el fondo así conseguiremos algo que anhelamos, ¿o no lo has notado?
“Gloria a Dios, porque provee para nosotros”, “Gloria a Dios, porque nos sana”,
“Gloria a Dios, porque concederá los anhelos de nuestros corazones”, ¿Qué te
dicen? “Obedece a Dios, porque así es como viene el milagro y la bendición”, La
biblia dice “obedece a Dios, porque él es el Señor, soberano y digno de ser
temido y obedecido y sobre todo, porque lo amas”….en el fondo, el reflector
sigue apuntando hacia nosotros, buscando lo que nosotros anhelamos….La biblia
dice “Gloria a Dios porque él es digno”, como dice un predicador “¿Si te
dijeran que Dios ya no te va a bendecir, ya no te va a dar cosas, lo seguirías
adorando?” o ¿perdería el encanto?, la verdad es que si Dios y sólo Dios no es
suficiente para nosotros, entonces no lo conocemos, si el verdadero tesoro es aquello
que Dios nos puede dar y no él mismo, entonces no lo conocemos.
La biblia no es acerca de
nosotros, la biblia es un testimonio acerca de la persona de Dios y de su Hijo
Jesucristo, la biblia habla acerca de él y en cada versículo, en cada historia de
la biblia lo que está reflejado no es lo que “hay para nosotros”, sino lo que
revela acerca de Dios, acerca de su carácter, acerca de su naturaleza. Como
dice un predicador, “¿Si te entregara una libreta en blanco y te pidiera que
escribieras acerca de la persona de Dios, su carácter, sus atributos, cuantas
hojas escribirías?, te aseguro que muchísimos cristianos no pasarían de media
página. ¿Pero si les pides que enlisten las promesas? ¡Te las redactarían hasta
por categoría! “Esta es para el dinero”, “Esta para la salud”, “Esta para el
trabajo”, la iglesia sufre de una anemia del conocimiento de Dios, la iglesia
se congrega para adorar y para ser edificada en el conocimiento de Dios y no
para obtener algo a cambio, no para cargarse de fuerzas para una semana más.
Buscamos incansablemente “el
propósito que Dios tiene para mi” e ignoramos que Dios ya nos compartió ese
propósito en su palabra, pero no lo queremos escuchar, porque inconscientemente
buscamos que el propósito de Dios sea el mismo propósito que YO MISMO quiero
para mí.
Dios tiene un propósito para
nosotros, para todos nosotros, es un propósito general, para toda la humanidad
y todo propósito personal por el cual podamos ser levantados va orientado y
apuntado al cumplimiento del primer gran propósito. Y ese propósito general es
este:
Isaías 43:7 Todos los llamados
de mi nombre; para gloria mía los críe, los formé y los hice.
Romanos 11:36 Porque de Él,
por El y para El son todas las cosas. A Él sea la gloria para siempre. Amén.
Apocalipsis 4: 11 Señor, digno
eres de recibir gloria y honra y virtud: porque tú criaste todas las cosas, y
por tu voluntad tienen ser y fueron criadas.
El principal propósito, la
razón por la cual fuimos creados fue para la gloria de Dios, si conociéramos a
Dios, como le deberíamos de conocer sabríamos que TODO es para su gloria.
-Porque nos creó? PARA SU
GLORIA (Isaías 43: 7, Proverbios 16:4, Romanos 11:36)
-Porque nos salvó? PARA SU
GLORIA (Salmos 106: 😎
-Porque predicar el evangelio?
PARA SU GLORIA (2 Corintios 4:4-6)
-Porque rendir fruto? PARA SU
GLORIA (Filipenses 1:11, Mateo 5:16)
-Porque es nos bendice? PARA
SU GLORIA (2 Corintios 1:20)
-Porque nos perdona? PARA SU
GLORIA (1 Samuel 12: 22, Salmos 79:9)
-Porque hace milagros? PARA SU
GLORIA (Juan 11:4)
-Porque adorar? PARA SU GLORIA
(Isaías 43: 21, Filipenses 1:11)
-Porque responde a nuestras
oraciones? PARA SU GLORIA (Juan 14: 13)
-Porque vivimos? PARA SU
GLORIA (1 Corintios 10: 31)
Está muy claro cuál debería de
ser muestro principal propósito, ¿Hay, aparte, propósitos específicos? Claro
que sí, Dios puede darle a alguien el propósito de ser pastor, de ser maestro,
de evangelizar en las calles, de ser misionero, de guiar a su familia, pero
todo propósito es en función del mayor y principal propósito de nuestras vidas,
SU GLORIA.
De tal manera que tenemos lo
siguiente, en las palabras de John Piper, “Dios te puede dar una gran riqueza,
pero lo hará para que la utilices de tal manera que traiga gloria a su nombre”,
“te dará sabiduría y conocimiento para que los utilices de tal manera que
glorifique su nombre, “Dios puede dar un negocio para que lo administres de tal
manera que traiga gloria a su nombre”. El fin último, el más importante y
principal, la pasión que te debería de mover, el mayor anhelo de tu corazón
debería de ser, GLORIFICAR A DIOS. De tal manera que, si hay algo en tu vida
que no lo puedas utilizar para la gloria de su nombre, hermano, no es de Dios.
Tú no puedes tener un negocio de venta de cerveza, porque no hay manera que lo
utilices para la gloria de Dios, de la misma manera no puedes ser usurero o
tener un casino o irte a apostar tú dinero, porque tales cosas no pueden ser
usadas para la gloria de Dios.
Ahora que conocemos nuestro
propósito, es más fácil comprender que la biblia, “no se trata de ti” y
volviendo al punto central de la presente, lo que hacemos con la biblia no es
sin consecuencia. La palabra de Dios es una gran verdad, de Génesis a
Apocalipsis es el testimonio de Jesucristo, son muchas historias y
acontecimientos que se deben de leer en el marco de una gran verdad, ¿pero ¿qué
hacemos? Separamos toda la palabra en una serie de “enseñanzas”, de tal manera
que si quiero saber acerca de cómo vencer los obstáculos de mi vida, acudo a la
enseñanza de “David Vs. Goliat”, si lo que quiero es saber cómo administrar mi
dinero, acudo a las enseñanzas de cierto apóstol, si necesito aliento en medio
de las tribulaciones, acudo a las enseñanzas de José, si necesito aprender a
tener fe, acudo a la historia de Abraham y de esta manera segmentamos la
palabra de Dios en pequeñas enseñanzas sobre moral y determinación, que sirven
para enriquecer “MI” vida.
¿Y luego que pasa?, esto es lo
que les estamos enseñando a los jóvenes y a nuestros hijos de tal manera que
cuando crecen y pueden ver que no han podido “vencer a sus gigantes” o no han
podido amasar la gran fe de Abraham o no pudieron pasar las pruebas, no
pudieron ser como David, como Moisés, o como José, entonces culpan a Dios y se
alejan, porque “aparentemente”, no se cumplieron en ellos, las promesas de Dios
que sus padres y pastores les habían enseñado.
Pasamos página tras página de
la palabra, buscando “lo que hay para mi” y nos perdemos de la verdadera
bendición de la palabra, “el conocerlo a Él”, nada nos capacitará mejor, nada
nos llenará más de fe que saber lo que Dios ha hecho en y a través de
personajes tan pequeños, humildes y llenos de fallas en las historias de la
biblia para su gloria, nos maravillaremos “en Él”, lo conoceremos “A Él” y no
estaremos distraídos pensando en lo que obtendremos para nuestro propio
bienestar.
Si nos adentramos en la
doctrina, encontraremos que la mayoría de los Cristianos tienen una doctrina
segmentada, es una serie de pequeñas doctrinas que no pueden conectarse entre
sí, están llenas de cabos sueltos porque han aprendido a hacer eso, a ver cada
historia en lo individual y aprender de cada historia lo que aprovecharía para
ellos, en su vida personal, pero estemos conscientes de esto, “Eso mismo lo
pudiéramos hacer con cualquier libro, con cualquier biografía”, la biblia se
separa de todo otro libro por lo que nos revela, no de nosotros, sino de Dios y
veremos una historia que empezó con Adán y terminó en Jesucristo, que comenzó
en Caín y terminó en Abel, que comenzó con la muerte, pero que termina en la
vida eterna…¿No lo ves verdad?, a través de toda la biblia vemos esta
revelación….”Primero nace la carne(muerte, pecado) y luego el espíritu (Vida,
Nuevo nacimiento), Adán(la carne), Jesús(Espíritu), Caín (Carne), Abel
(Espíritu), Esaú (Carne), Jacob (Espíritu), primero nacemos muertos en nuestros
pecados, después nacemos de Dios, nacemos en espíritu. Estas verdades jamás las
encontrarás buscando “lo que hay para ti” y podemos ver a través de la palabra,
una sola verdad que apunta, ¿A dónde? al centro de la biblia, a Jesucristo.
Pero el conocer las maravillas
de Dios no vendrán buscando “tu milagro” o “tu bendición”, sino buscando a
aquel que bendice, y no buscándolo para que “te bendiga”, sino buscándolo a él,
él es el premio, él es la recompensa, él es el motivo, él es el anhelo, él es
el tesoro, él es la perla de gran precio, nos bendiga o no….Para la gloria de
su nombre, de tal manera que si su nombre es glorificad a través de tu
bendición, que así sea, si es glorificado a través de tu riqueza, que así sea,
pero si es glorificado a través de tu enfermedad, que así sea, a través de tu
muerte, que así sea!
Filipenses 3:8 Y ciertamente,
aun estimo todas las cosas como pérdida por la excelencia del conocimiento de
Cristo Jesús, mi Señor, por el cual lo he perdido todo, y lo tengo por
estiércol, para ganar a Cristo,
Cuando lo estimemos todo como
pérdida, podremos “ver” las gemas y diamantes, los tesoros que encierra la
biblia y cuyo centro y cúspide es Jesucristo. Vemos claramente, desde Moisés,
el centro era Jesucristo, los Salmos, los profetas, la ley, ¡todo apunta hace
Jesucristo!
Lucas 24:44 Y les dijo: Esto
es lo que yo os decía cuando todavía estaba con vosotros: que era necesario que
se cumpliera todo lo que sobre mí está escrito en la ley de Moisés, en los
profetas y en los salmos.
Hechos 3: 18 Pero Dios ha
cumplido así lo que anunció de antemano por boca de todos los profetas: que su
Cristo debería padecer. 19 por tanto, arrepentíos y convertíos, para que
vuestros pecados sean borrados, a fin de que tiempos de refrigerio vengan de la
presencia del Señor, 20 y Él envíe a Jesús, el Cristo designado de antemano
para vosotros, 21 a quien el cielo debe recibir hasta el día de la restauración
de todas las cosas, acerca de lo cual Dios habló por boca de sus santos
profetas desde tiempos antiguos. 22 Moisés dijo: EL SEÑOR DIOS OS LEVANTARA UN
PROFETA COMO YO DE ENTRE VUESTROS HERMANOS; A EL PRESTAREIS ATENCION en todo
cuanto os diga.
Leemos los pasajes y las
historias de grandes personajes, pensando acerca de nosotros mismos y nos
perdemos del tesoro que encierran esos pasajes, Tim Keller predica a Cristo de
la siguiente manera:
- “Jesús es el verdadero y
mejorado Adán que sí pasó la prueba en el huerto, siendo el suyo, un mucho más
difícil huerto y su obediencia es imputada a nosotros.”
- “Jesús es el verdadero y
mejorado Abel, siendo inocentemente asesinado y su sangre no clama para una
condenación, sino para nuestra salvación”
- “Jesús es el verdadero y
mejorado Abraham, que contestó el llamado de Dios de dejar todo lo confortable
y familiar y salir a lo incierto y desconocido.”
- “Jesús es el verdadero y mejorado
Isaac, que no sólo fue ofrecido por su Padre en el monte, sino que realmente
fue sacrificado por nosotros. Abraham no rehusó su hijo a Dios y Dios no nos
rehusó su Hijo a nosotros.”
- “Jesús es el verdadero y
mejorado Jacob, quién luchó y recibió el golpe de justicia que, para que
nosotros, como Jacob, sólo recibamos las heridas de la gracia, que nos
despierta y nos disciplina.”
- “Jesús es el verdadero y
mejorado David, Quien en verdad derrotó al único gigante que en verdad nos
puede matar y su victoria es imputada a nosotros.”
- “Jesús es el verdadero y
mejorado José, que se sienta a la diestra del Rey y perdona a aquellos que lo
han traicionado y que lo vendieron y él utilizó su poder para salvarlos.”
- “Jesús es el verdadero y
mejorado Moisés, quien se para en la brecha entre Dios y su pueblo mediante un
nuevo pacto.”
- “Jesús es el verdadero y
mejorado Job, el verdaderamente inocente que sufre por nosotros.”
- “Jesús es el verdadero y
mejorado Jonás, quien fue echado a la tempestad por nosotros.”
De Génesis a Apocalipsis,
¡Jesús es el mejor y mejorado Profeta, Pascua, Cordero, Rey, Templo, Sacrificio,
Sacerdote y Pan de vida!
No te pierdas los tesoros de
Dios, cuando leas la palabra de Dios, despójate de ti mismo, carga tu cruz y
búscalo a él en la escritura y conocerás la verdadera y mejorada bendición, el
verdadero y mejorado milagro…a nuestro Señor y Salvador, ¡Jesucristo!
Marcelo Vélez
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